Cómo cambiar las llantas de un coche

Una de las actividades diarias de un taller mecánico es realizar un cambio de llantas. Ya sea para mejorar la estética de tu coche o para adecuarlas a los neumáticos, es un proceso clave. Contribuye a mantener la seguridad, a que cumplas con las normativas vigentes y a personalizar el vehículo.

Desde Talleres AGM te queremos contar un poco más sobre este elemento de tu coche.

¿Qué  son las llantas de coche?

Antes de analizar cómo se realiza el proceso, conviene que entiendas qué es una llanta. Se trata de una pieza redonda fabricada en metal sobre la que se coloca el neumático, al que sostiene y ayuda para que mantenga su forma. Igualmente, une la rueda en sí con el eje donde está colocada para que se transmita la energía que proviene del motor.

Suele ser un elemento que se deteriora estéticamente con facilidad, pues se suele rozar al aparcar, por la suciedad acumulada, por pequeños golpes contra bordillos. Es importante saber que aunque las llantas tienen un factor estético no solo son una pieza para embellecer las ruedas de tu coche, sino que son importantes para mantener la seguridad de tu coche.

¿Cómo cambiar una llanta?

Cambiar una llanta es un proceso que resulta no excesivamente complicado. Para empezar, se separa el aro metálico del neumático cuando está desinflado. De lo contrario, podría provocar alguna lesión al despresurizar la cámara interna. Poco a poco, se van separando ambas partes de la rueda haciendo palanca con fuerza, pero sin provocar daños en ninguno de los dos elementos.

En caso de que tengas problemas para retirar el neumático, puedes utilizar un líquido que actúe como lubricante. Un buen ejemplo es el agua con jabón, dado que aporta una viscosidad que facilita la separación. Así no tendrás que hacer tanto esfuerzo para retirarlo de la llanta y reduces las probabilidades de causar daños que la inutilicen.

A la hora de montar el nuevo aro de metal, colócalo en una superficie estable. Tras esto, pon el neumático encima y, al igual que hiciste para separar, haz palanca para introducirlo poco a poco, algo que hay que hacer por los dos lados. Para terminar, solo tienes que inflar la cámara de la rueda y podrás circular con normalidad, tal y como lo hacías antes del cambio.

¿Qué dice la normativa acerca de las llantas?

Otro aspecto interesante sobre el cambio de llantas es la legislación que lo rige. Las indicaciones se encuentran recogidas en la normativa de la ITV (Real Decreto 920-2017) y son bastante claras respecto a cómo hay que actuar. Por ejemplo, se indica que al instalar un conjunto nuevo de llanta y neumático, el desarrollo no puede superar o rebajar el 3 %.

Si se cumple con ese porcentaje, el conjunto será válido, se considerará homologado y podrás circular con normalidad. Sin embargo, si superas el desarrollo indicado por el real decreto, tendrás que realizar un trámite que puede resultar costoso.

Según la normativa citada, necesitas efectuar un proyecto que certifique el montaje de las llantas y que debe realizarlo un ingeniero especializado en este ámbito. Tras esto, debes acudir una vez más a la ITV para homologar el cambio e incluirlo en la ficha técnica de tu coche. Por tanto, te enfrentas a un proceso largo y que podría resultarte muy caro.

Además, en un primer momento, al no tener el desarrollo adecuado, no superarás la ITV, lo que dará pie al proceso que acabas de leer. Con el fin de ahorrarte el trámite, procura montar unos aros que sean del mismo modelo y marca que tu coche. Pero no olvides revisar a fondo las equivalencias para que las dos piezas, la llanta y el neumático, sean compatibles.

Tipos de llantas existentes

Es importante conocer la clase de llanta que tu coche ha de usar, porque no todas ellas son iguales.

Existen diferentes tipos de llantas como las de aleación de aluminio, llantas de acero, más resistentes y económicas, las cromadas o las revestidas de plástico.

Cambia las llantas de coche en Talleres AGM

Como ves, cambiar una llanta es sencillo, aunque debes tener en cuenta lo que indica la normativa vigente. Recuerda llevar a cabo el proceso con cuidado y, en caso de duda, consulta siempre con un profesional. Te asesorará sobre las mejores prácticas disponibles. Con ellas evitarás cometer errores que pueden ser caros de subsanar, tanto en términos económicos como en el tiempo invertido. En caso de que no puedas hacerlo por tí mismo, ven a Talleres AGM, tu taller mecánico de confianza en Albacete.